Ir al contenido principal

LA VIOLENCIA PSICOLÓGICA: CONDUCTA ASIMILADA A TRAVÉS DEL TIEMPO O CONDUCTA DE MODA.

Por: Dra. Frances Roulet
Doctora en Psicología Clínica
Maestra de Escuela de Graduados de UTESA
Clínica Unión Médica
La conducta simuladora, entretejida con las fibras sociales que ocasionan daños físicos, pero en especial daño psicológicos es aquella agresión no sospechada de una forma sutil, elaborada con mucho disimulo, ésta en especial ejercida por personas brindando protección, de atención, de buenas intenciones y buenos deseos son iguales agresores ejerciendo violencia psicológica. Estos agresores les sobreprotegen rodeándoles de atenciones, de mimos y de cuidados, pero no les permiten desarrollarse como persona independiente, les atropellan sus derechos a la libertad y no les dejan salir del entorno falso que han fabricado.
La violencia psicológica representan un fenómeno viejo, lo novedoso es su revelación como problema social y medio ambiental.
La violencia psicológica se basa en comportamientos intencionados, ejecutados desde una posición de poder y encaminados a desvalorizar, producir daño psíquico, a destruir la autoestima y reducir la confianza personal. Su padecimiento lleva a la despersonalización, al mismo tiempo que genera dependencia hacia persona que los inflige. El maltratador se vale para ello de insultos, acusaciones, amenazas, críticas destructivas, gritos, manipulaciones, silencios, refunfuños, indiferencias, frialdades y desprecios. El hostigador o agresor o maltratador suele manipular a su víctima y su entorno para que llegue a creer que todo son exageraciones suyas que tiene la culpa de lo que sucede o simplemente de lo que supuestamente no está sucediendo. De manera que todo el mundo opine que es un excelente ciudadano, empresario, empleado, cónyuge, compañero o amigo, mientras la víctima es la persona que le quiere destruir o la o el culpable de las circunstancias. Y esto es en el supuesto caso de que la víctima se queje o ejerza sus derechos como ser humano de poder vivir sin el hostigamiento o violencia psicológica o física.
No obstante, por más sutil y simulado que sea, la violencia psicológica puede ser difícil de demostrar en comparación con la violencia física, pero no es imposible. Pues las huellas que quedan en la psiquis son visibles, pero para aquellos que carecen de conocimiento no son visibles. Las secuelas de la violencia psicológica dejan marcas inconfundibles en el organismo de la víctima. En su cuerpo o al nivel psicológico, pues el cuerpo y la parte psicológica interactúan formando así la parte psicosomática en la persona. Los estudios recientes han indicado que muchas personas pueden desarrollar personalidades adictivas, psicóticas o violentas de mantener secuencial y sostenida las conductas del hostigador o agresor.
Y, si bien es cierto que existen diversas perspectivas sobre la violencia psicológica, lo cierto es que no podemos darnos el lujo, ni permitir que este tipo de conducta sea negada, justificada, o intelectualizada por otras personas, familiares, amigos, vecinos, políticos o representantes gubernamentales. El negar, jugar juegos psicológicos o manipular las circunstancias o simplemente dar la espalda a las circunstancias de la conducta de la violencia psicológica es permitir que el agresor u hostigador continúe con la misma conducta violenta, y nos convertimos en colaboradores de esa misma violencia psicológica sin haber levantado la mano o la voz. Tampoco podemos comparar situaciones porque todas varían de acuerdo con los factores, personajes y circunstancias que le rodea.
Si algún momento te detienes a pensar sobre la violencia psicológica,  ya tienes un indicio claro que eres una víctima o conocer a una víctima de la violencia psicológica. Pare de sufrir en silencio, solo perpetuas la misma violencia psicológica…dígale NO AL SÍNDROME DE ESTOCOLMO! Si sabes que las circunstancias vividas de situaciones violentas e incomprensibles te están produciendo padecimientos o malestares, y tienes claro el porqué, NO DUDES, NO TEMAS de ser una víctima de la violencia psicológica…EMPODERATEEJERCE TUS DERECHOS!

Comentarios

Entradas populares de este blog

EFECTOS PSICOLÓGICOS DE LA CONTAMINACIÓN ACÚSTICA.

Desde que el mundo es mundo, el ruido siempre ha existido, pero no ha sido hasta el siglo pasado que los investigadores (psicólogos y médicos) descubrieron los efectos nocivos que ha estado provocando en el ser humano. El exceso de ruidos afecta directamente la salud y la salud mental de las personas, y por otro lado, es casi imposible realizar actividades diarias en el medio ambiente sin ocasionar ruidos. Pero existen ruidos que podemos extinguir o minimizar para evitar que afecten nuestra salud mental y salud físico, pues de no hacerlo estaremos teniendo repercusiones en el comportamiento humano al elevarse el estrés y la ansiedad de la personas. Se ha podido comprobado científicamente que los índices de decibeles sobre los 55 a 60 dBa causan molestias; de 60 a 65 dBa empeora las molestias auditivas, y sobre este margen de índice de decibeles se producen perturbaciones de la conducta humana. Entonces, la contaminación acústica, ha sido definida como aquellas que se genera por ruid

TENEMOS EN REALIDAD UNA SALUD MENTAL SANA

Desde hace varios años hemos estado hablando sobre la prevención de una salud mental sana, pero analizando estas dos palabras estamos mal interpretando su significado real. Hoy, más que nunca necesitamos enfatizar en la necesidad de enfrentar los problemas que se están provocando en la salud mental a lo largo del proceso del desarrollo sostenido. Y no debemos olvidar que parte de ésta salud mental es también la salud física, pues ambas no pueden ser separadas por su relación directa entre sí. La Organización Mundial de la Salud, [OMS] ha definido la salud mental como aquel estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente en la ausencia de afecciones o enfermedades. Es esta misma organización que entienden y clarifica que una buena salud mental está relacionada con la promoción del bienestar, la prevención de los trastornos mentales y sus tratamientos y rehabilitaciones de aquellas personas afectadas por dichas patologías. La Federación Mundial d